Las opciones de tratamiento dependen de la gravedad de la epífora y sus causas. Conductos lagrimales bloqueados: puede ser necesaria una cirugía que cree un nuevo canal desde el saco lagrimal hasta el interior de la nariz. Esto permite que las lágrimas pasen por alto la parte bloqueada del conducto lagrimal. Este procedimiento quirúrgico se llama DCR (dacriocistorhinostomía). Epífora (ojo lloroso) en los bebés - en la mayoría de los casos la condición se resuelve por sí sola en unas pocas semanas. A veces se puede formar un líquido pegajoso alrededor de los ojos del bebé.
En tales casos, el uso de un trozo de algodón que haya sido empapado en agua estéril se puede utilizar para limpiar el(los) ojo(s). El agua estéril necesita ser hervida - asegúrese de que se enfríe antes de mojar el algodón en ella. Si el paciente tiene ectropión - el párpado gira hacia afuera - el paciente puede necesitar someterse a una cirugía en la que se aprieta el tendón que mantiene el párpado externo en su lugar.
En casos de triquiasis, una pestaña que crece hacia adentro, o algún objeto extraño que se haya alojado en el ojo, el médico se lo extirpará. Tratamiento para la irritación: si el ojo lloroso es causado por conjuntivitis infecciosa, el médico puede preferir esperar una semana más o menos para ver si el problema se resuelve solo sin antibióticos. Cuando la conjuntivitis alérgica es la causa, al paciente se le puede recetar un antihistamínico, que es eficaz para reducir la inflamación.